Vestas y las dudas sobre el modelo de subvenciones a la eólica

Vestas prevé cesar la producción en sus fábricas de Lauchhammer (Alemania), Vivero (España) y Esbjerg (Dinamarca), pese a que la compañía "mantiene su fuerte presencia productiva en el continente y sigue suministrando componentes de turbinas eólicas terrestres y marinas a sus clientes desde doce plantas en toda Europa, propiedad tanto de Vestas como de sus socios en la cadena de suministro", según informaron.

La noticia ha sido de gran impacto para la región gallega, pero también lo es para el sector de las renovables en general, puesto que pone en duda un modelo de subvenciones a la instalación de fábricas y parques que no acaba de ofrecer resultados, en momentos en que el precio de la electricidad golpea el bolsillo de los españoles más que nunca.

"No se puede seguir permitiendo que, primero las administraciones faciliten la actividad de determinadas empresas con subvenciones y otro tipo de facilidades para sus actividades y, después, estas decidan trasladar su producción sin una explicación productiva e industrial clara, simplemente por un ahorro de determinados costes", opinan los sindicatos gallegos. 

La compañía justificó el cierre de las instalaciones por la falta de demanda del generador de 2 megavatios que fabrican en Galicia y por la necesidad de «optimizar» la producción para la eólica marina, según trasladó en un comunicado.

Se trata del segundo fabricante de aerogeneradores que baja la persiana en Galicia en pleno boom de proyectos eólicos, ya que antes lo hizo Siemens-Gamesa. Curiosamente, el cierre guarde ciertos paralelismos, pues Gamesa adquirió poco antes del ERE en As Somozas una planta en Aveiro (Portugal), y Vestas también destinó en los últimos años fuertes inversiones al norte del país vecino, concretamente, a la construcción de un centro de I+D en Oporto.