Llega a Canarias el nitrógeno para inflar neumáticos. ¿Merece la pena?

Carburos Metálicos presenta la semana próxima el primer punto de inflado público de neumáticos con nitrógeno de Canarias, en la gasolinera Cepsa de El Cubillo (Telde). Aunque parezca novedoso, el nitrógeno lleva tiempo siendo utilizado tanto en competición (la Fórmula 1) como en el mundo de la aeronáutica. 

Tratándose de dos campos de aplicación muy diferentes al de los turismos de calle, conviene analizar las ventajas y desventajas de esta innovación. 

La empresa impulsora afirma que con el nitrógeno se previene el desgaste prematuro de las gomas al mantener la presión correcta durante más tiempo, lo que se traduce a su vez en un ahorro de combustible y una menor emisión de partículas de los neumáticos, "un aspecto que la próxima norma Euro 7 limitará por primera vez". 

Por su parte, entre las contras podemos señalar el precio, al tratarse de un servicio por el que hay que pagar entre 3 y 5 euros por neumático. El nitrógeno es un gas que se manipula tan sólo con autorización y en lugares especializados.

Es cierto que si tras comprobar la presión en cualquier gasolinera, y con cualquier manómetro convencional, detectamos que está demasiado baja, podemos rellenar con aire. Pero conforme mezclamos aire y nitrógeno vamos perdiendo los beneficios de este último gas. Por lo tanto debes buscar establecimientos que ofrezcan estos servicios para recuperar presión. 

Un factor a favor del nitrógeno es que, a diferencia del aire que contiene oxígeno, reduce o elimina las posibilidades de oxidación de la llanta y del neumático en su parte interior, la que está en contacto con el propio nitrógeno.

También cabe recordar que cuando inflamos un neumático con aire ya estamos haciéndolo con nitrógeno en gran parte, pues el aire que un compresor o una bomba de mano introduce en el neumático es el mismo aire que respiramos, que además de otros elementos está compuesto de un 21 por ciento de oxígeno y un 78 por ciento de nitrógeno.

Por último, desde el punto de vista del conductor, no esperes notar nada durante la conducción, pero tendrás que evaluar por comparación si realmente aprecias una mayor estabilidad en las presiones de las ruedas con el tiempo. Sin embargo, aunque utilices nitrógeno, debes seguir comprobando las presiones, inicialmente al menos una vez al mes.